En una mañana de invierno en el Colegio Mayor Tobalaba, estábamos la
Anto, la Isadora y yo en la biblioteca; ya que no había nadie más aprovechamos
para intrusear en la sección prohibida donde encontramos un libro muy peculiar
y extraño. Sólo tenía una tapa negra que
ni siquiera tenía un título, sólo
lo protegía una cinta de color rojo oscuro. Se nos ocurrió una muy mala idea:
abrirlo, cerré los ojos y tiré de la cinta cuando….!!paff¡¡ salimos volando
hacia atrás y vimos que del libro salían duendes, fantasmas, hadas y animales
extraordinarios.
!!Oh no¡¡- dije yo- ahora van a causar un caos. Y así fue justamente.
Comenzaron a correr por todos lados, los duendes miraban a los niños con lupas,
las hadas jugaban con todo lo que encontraban, los profesores arrancaban de un
dragón, los fantasmas asustaban a los niños que estaban en el baño, los ratones
se comían las colaciones que se robaban, algunos unicornios lanzaban hechizos a
los árboles que comenzaron a hablar, los hombres lobo recitaban una canción de
aullidos y un gato sonriente charlaba solo !!!Todo un caos¡¡
Parece que la embarramos – dijo la Isa- y tuvimos que tomar el libro
para saber que hacer ahora, en la última página decía que el contrahechizo era
decir las palabras mágicas. Nos pusimos en el medio del patio y gritamos
!!!WEKUN FEWLA¡¡¡ (que en mapuche significa !fuera ahora¡) y en un dos por tres
todos comenzaron a volver al libro. La Antonia tomó rápidamente y lo cerró con
una cinta de color rojo oscuro y rápidamente lo tiramos al inhodoro, al tirar
la cadena el libro se fue y yo me pregunto ¿Dónde habría ido?
P.D: años después un chinito se preguntaba ¿De donde habrá salido este
hermoso y maravilloso libro?
fin.
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